Museo Diocesano
El edificio fue construido en 1834 y actualmente es propiedad de la archidiócesis y da testimonio de la historia cristiana de la ciudad. Inicialmente, el museo solo tenía obras modestas como sarcófagos, lápidas y losas. Posteriormente, el museo acogió varias obras de arte, debido al cierre de las iglesias o a su destrucción derivada de las guerras. Además, el museo también conserva una colección de monedas y medallas de los períodos romano y medieval.